Tres maneras en las que el zinc ayuda a tu sistema inmunitario

Tres maneras en las que el zinc ayuda a tu sistema inmunitario

Cuando nos enfocamos en mantener un cuerpo saludable, los nutrientes juegan un papel crucial. Hay nutrientes que tu cuerpo requiere en grandes cantidades, los cuales son conocidos como macronutrientes; entre ellos podemos mencionar los carbohidratos, las proteínas y las grasas. Estos nutrientes le proporcionan a tu cuerpo la energía que necesita para desempeñar sus funciones normales. Asimismo, existen otro tipo de nutrientes que tu cuerpo necesita en menor cantidad, es decir, los micronutrientes como las vitaminas y minerales los cuales no le brindan energía a tu cuerpo, pero habilitan las distintas reacciones químicas que regulan las funciones del cuerpo.

Muchos de nosotros estamos familiarizados con los términos carbohidratos, proteínas y grasas, ya que forman parte de nuestras comidas diarias y se han convertido en un tema popular en cuanto a salud se refiere.

Nuestros conocimientos acerca de las vitaminas también han aumentado a medida que sale a la luz más información acerca de la importancia que tienen en nuestra salud.

Por otra parte, es muy poco lo que se habla acerca de los minerales, pero eso no significa que sean menos importantes. De hecho, son tan esenciales como el resto de los nutrientes, y cuando se trata de brindar respaldo a la salud de tu sistema inmunitario, uno de ellos es altamente reconocido, nos referimos al zinc.

El zinc y tu sistema inmunitario

El zinc es el segundo mineral más abundante en el cuerpo. 1Es necesario para la actividad de cientos de enzimas y juega un papel importante en muchos procesos del cuerpo tales como la síntesis de la proteína, la cicatrización de las heridas y la división de las células.

El zinc también ha demostrado ser un elemento clave en la salud del sistema inmunitario. A partir de los años sesenta, los estudios realizados en individuos con deficiencia de zinc resaltaron la importancia de este mineral en el funcionamiento correcto del sistema inmunitario.2 A pesar de que la investigación aún se encuentra en su fase inicial, se ha descubierto mucho acerca de la forma en que actúa el zinc para mantener el funcionamiento óptimo del sistema inmunitario. A continuación mostramos lo que conocemos hasta ahora:

1. El zinc es vital para el desarrollo de las células del sistema inmunitario2,3

Tu cuerpo tiene varios tipos de células del sistema inmunitario, y el zinc es necesario para la maduración y diferenciación de esas células. Cuando la cantidad de zinc en tu cuerpo está por debajo de cierto nivel, el desarrollo de las células que participan tanto en la inmunidad innata (general) como en la inmunidad adaptiva (especializada), se ve afectado. Estas células incluyen a los macrófagos, las células asesinas naturales (NK), las células T y las células B.

2. El zinc es esencial para el funcionamiento correcto de las células inmunitarias2

Las funciones de las células del sistema inmunitario, tales como la eliminación de los invasores externos y la producción de citoquinas dependen del zinc.

3. El zinc es necesario para la comunicación entre las células del sistema inmunitario4

El zinc ha demostrado actuar como una molécula de señalización, la cual controla una variedad de funciones de las células del sistema inmunitario.

Ingesta diaria de zinc

De acuerdo al National Institute of Health (NIH), los adultos necesitan de 8 a 10 mg de zinc al día.5 Debido a que el cuerpo no produce zinc de forma natural, se le considera como un nutriente esencial y debe obtenerse a través de los alimentos que consumes. Una gran variedad de alimentos contiene zinc, como, por ejemplo, las carnes rojas, las aves de corral, los frijoles, las nueces, los mariscos, los granos integrales, los cereales fortificados para el desayuno y los productos lácteos. Sin embargo, a los alimentos de origen animal suelen considerárseles como una mejor fuente de zinc debido a la presencia de fitatos en los granos y alimentos de origen vegetal, los cuales se adhieren al zinc e impiden su absorción.

A pesar de que la mayoría de las personas probablemente obtiene la cantidad de zinc necesaria mediante los alimentos que consumen, otras personas pueden necesitar una cantidad adicional. Esto puede lograrse ya sea incrementando el consumo de alimentos con un alto contenido de zinc o mediante suplementos de zinc. Para facilitar la absorción, la mayor parte del zinc que se encuentra en los suplementos es zinc quelado, lo cual significa que está adherido a otra molécula, generalmente un aminoácido. Los tipos comunes de suplementos de zinc incluyen:

  • Gluconato de zinc
  • Sulfato de zinc
  • Acetato de zinc
  • Metionina de zinc

Antes de decidir agregar un suplemento de zinc a tu dieta, es recomendable consultar con tu médico, esto con el fin de evitar efectos adversos para la salud.

Referencias
https://medlineplus.gov/ency/article/002416.htm
1. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5748737/
2. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2277319/
3. https://www.hindawi.com/journals/jir/2016/6762343/
4. https://ods.od.nih.gov/factsheets/Zinc-HealthProfessional/